Fotografía: Ivet Pasquel
Derivado de que se rescindió el contrato a la empresa que ganó la licitación para la ampliación de la Clínica de Medicina Familiar del ISSSTE en Tulancingo continúa paralizada la obra de construcción, señaló Nayelli Altamirano Hernández, subdelegada de administración del ISSSTE en Hidalgo.
La subdelegada refirió que la obra registra un avance físico del 22 por ciento, la cual debió haberse concluido desde el 2015, por lo que reporta un retraso de por lo menos cinco años.
Recordó que se rescindió el contrato a la empresa debido a que no cumplió con las clausulas, motivo por el cual el área jurídica de la institución de nivel central inició un proceso jurídico, por lo que no puedan rescatar la infraestructura hasta que haya una resolución judicial.
De la misma manera, informó que en Pachuca hay dos obras que también están en este estatus aunque no es con la misma empresa, se trata de la ampliación y construcción del Hospital General Columba Rivera Osorio, por lo que debido a los litigios se desconoce cuándo se retomarán los trabajos.
“El tema es complicado, el tener un proceso jurídico llega un notario y certifica el estado de cómo se quedarán las obras, de ahí entra el proceso jurídico hasta que no hay una resolución nos dirán cuándo podremos ingresar”, explicó.
Dio a conocer que la ampliación del nosocomio reporta un avance del 80 por ciento y la construcción registra rezago del 30 por ciento, pues también abarca el equipamiento y el inmobiliario.
El retraso de las obras, señaló que afecta en la proyección de infraestructura y ampliaciones que se hizo en años anteriores, pues cada día crece la población derechohabiente.
A pesar del escenario, afirmó que no se ha negado la atención a los derechohabientes, pero aclaró que es necesario contar con mayor infraestructura hospitalaria.
ENCA