Fotografía: ADN
La proyección que se tiene para dentro de unos años, es que la población de México estará compuesta más por adultos mayores que por jóvenes, los cuales van a requerir tanto programas como modelos de atención social que los beneficien, es por ello que se vuelve necesario contar con profesionales capaces de hacerlo.
El jefe del Área Académica de Gerontología del Instituto de Ciencias de la Salud (Icsa) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Raúl Agís Juárez, refirió que esto se debe a que hoy se tiene una disminución en los índices de fecundidad porque las personas cada vez tienen menos hijos y porque hay un aumento de la esperanza de vida en las personas, de ahí la importancia de integrar cada vez más a los gerontólogos en cualquier sector.
Ya que al tener un perfil multidisciplinario esto les permite crear planes de intervención oportunos que puedan atender a la población adulta mayor, pues hoy estas personas ya no solo demandan atención en materia de salud, sino que también están solicitando actividades recreativas, para lo cual es necesario crear alternativas que permitan atender al sector conforme a su edad.
Refirió que hoy el gerontólogo ya no se circunscribe sólo al tema de la salud, sino que puede insertarse en cualquier sector para contribuir a un envejecimiento exitoso, es decir, dar atención oportuna a personas de cualquier edad dentro de su crecimiento psicológico y físico para que lleguen a la vejez en las mejores condiciones.
Incluso este profesional puede dar acompañamiento a los cuidadores primarios de las personas adultas mayores, porque si no se les da una asesoría oportuna, el cuidado podría convertirse en una carga que afecte su salud emocional o física.
Ante esto agregó que no debe confundirse aún gerontólogo con un geriatra, pues este último es quien se especializa en tratar las patologías propias del envejecimiento de personas de más de 60 años, que es cuando ya se considera a alguien adulto mayor, mientras que un gerontólogo puede intervenir en cualquier momento de la vida de una persona, ya que todos los días se envejece.
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