Fotografía: Especial

 

Por tercer año consecutivo, México se estancó en materia de percepción de corrupción durante el 2022, de acuerdo con la organización Transparencia Internacional.

El país se posicionó en el lugar 126 y obtuvo una calificación de 31 sobre 100 en el IPC, el equivalente a la calificación de Bolivia, Laos y Uzbekistán.

“México no ha sido capaz de mejorar su calificación en el IPC por tercer año consecutivo. Después de cuatro años de gobierno de López Obrador, no se ha condenado a ningún alto funcionario o directivo en los casos de corrupción, algunos de los cuales envuelven a su red política”, sentenció la organización.

La organización Transparencia Internacional afirmó que la tensión entre el presidente y las instituciones con autonomía constitucional y de garantizar elecciones libres y justas “muestra una tendencia a socavar los controles y contrapesos necesarios para una democracia funcional”.

A nivel del continente, el país se encuentra muy por debajo de Canadá, Uruguay, Estados Unidos o Chile pero por encima de Venezuela, Haití, Nicaragua, Honduras y Guatemala, países considerados por Transparencia Internacional como algunos de los más corruptos del planeta.