Fotografía: Cris Huerta

 

En el mes de agosto dará inicio un proceso de consulta dirigido a atender las necesidades económicas, culturales e ideológicas del pueblo otomí, así lo informó Miguel Ángel Tello Vargas.

“Es un proyecto precioso”, expresó el titular de la Unidad de Planeación y Prospectiva de Hidalgo al referirse a esta iniciativa que busca construir un plan de justicia para los pueblos originarios, en coordinación con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) y la Comisión Estatal para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas.

Durante su declaración, el funcionario explicó que desde el año 2018 se comenzó a estructurar un documento en el que se establecen acuerdos entre Gobierno federal, Gobierno estatal y las comunidades originarias.

“La finalidad de los planes de justicia desde ese entonces hasta ahorita es que se defina en conjunto un proyecto para resarcir los daños históricos, más que los daños, la falta de atención que han tenido los pueblos originarios”, aseveró.

Miguel Tello detalló que uno de los principales objetivos de este plan es evitar la pérdida de lenguas originarias, preservar las culturas y mantener vivas las tradiciones ancestrales.

Añadió que el proceso de consulta se realizará directamente con las comunidades, mediante asambleas y encuentros.

“Estamos estructurando el proyecto participativo de plan de justicia en conjunto con el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas y la Comisión Estatal de Pueblos Indígenas, y estaremos en los siguientes meses comenzando con el proceso de consulta a través de los pueblos, comunidades, en asambleas atendiendo y platicando con la gente para saber cómo podemos atender no solamente las necesidades económicas, sino también, ideológicas, lógicas y culturales”, puntualizó.

Con este ejercicio participativo, se busca trazar un camino conjunto que responda de manera integral a las demandas históricas de los pueblos originarios de Hidalgo, particularmente del pueblo otomí.