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Este lunes, representantes ucranianos sostuvieron negociaciones con portavoces rusos en territorio fronterizo para solucionar el conflicto lo más pronto posible.
Bielorrusia, país vecino de ambas naciones cuyo gobierno es aliado de Moscú, fue la sede para las negociaciones en el quinto día de la invasión contra Ucrania.
Luego de varias horas de diálogo, ambas partes regresaron a sus capitales correspondientes para realizar consultas antes de una segunda ronda de conversaciones.
«Las partes establecieron una serie de prioridades y cuestiones que requieren algunas decisiones», dijo Mikhailo Podoliak, uno de los negociadores ucranios, mientras que su homólogo ruso, Vladimir Medinski, indicó que la nueva reunión tendrá lugar «pronto» en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
Entre las peticiones rusas, se incluye el reconocimiento de la soberanía rusa en Crimea, anexada en 2014, la «desmilitarización» del Estado ucraniano y la neutralidad de dicho país según el Kremlin.
Por su parte, el presidente ucranio, Volodimir Zelenski, instó al ejército ruso a retirar las tropas invasoras en su territorio.
Pese al futuro de dichas negociaciones, Zelenski firmó la solicitud para formar parte de la Unión Europea, sin embargo, la comisión tarda entre 15 y 18 meses en emitir un dictamen, pero «ese plazo puede ser más largo o más corto, dependiendo de consideraciones políticas”, señalaron fuentes europeas.
Los Estados miembros hicieron hincapié en su negativa a la agresión rusa contra Ucrania, aunado a esto, la opinión pública también será un factor que determinará la respuesta de la UE.
YOG