Fotografía: Especial

 

Refugios para animales maltratados están al tope, por eso solicitan activistas que la sociedad se involucre en el trabajo de rescate y atención a perros y gatos en situación de calle.

Leticia Jiménez, al frente de la asociación civil La Jauría de Balú, explicó que Hidalgo es el cuarto lugar a nivel nacional en condición de calle, así como maltrato.

Externó que el primer eslabón en la cadena de maltrato está en que los animales son adquiridos de manera fácil, ya sea como un producto o regalo.

La activista lamentó que la sociedad gira en torno a una cultura de tendencia consumista, lo que lleva a considerar a los perros como producto y no como seres sintientes.

También indicó que los refugios fueron creados para apoyar a los animales en situación de extremo maltrato, sin embargo, la gente a malentendido su función y los llevan solo por abandonarlos, de ahí que la solicitud de la activista es a cobrar consciencia sobre la adopción.

“Es importante considerar adoptar a un perrito que está en el refugio, que lo vean como parte de su familia y dejar a un lado que quieran conseguir un perrito de cierta raza y ciertas características”, afirmó Leticia Jiménez.

La portavoz de La Jauría de Balú dijo que la invitación a la sociedad es tener la consciencia de que adquirir un perro o un gato es una responsabilidad que incluye, no sólo comida, también un lugar digno, tiempo y atención.

“Ojalá que incluyan la consideración que es un perrito que les tiene que durar mínimo 10 años, que va a conllevar responsabilidades económicas, de tiempo y cariño”, externó.