Fotografía: Especial

El expresidente Evo Morales hizo un llamado a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a reconocer que en Bolivia hubo un golpe de Estado, y pidió que países y organismos internacionales organicen un diálogo abierto de todas las partes en conflicto para garantizar el regreso a la normalidad democrática de su país.

En conferencia de prensa, Evo también llamó a la policía y a las fuerzas armadas a no reprimir a la gente. “No se manchen con la sangre del pueblo”.

Según publicó el portal Sin Embargo, el asilado político acusó a la Organización de Estados Americanos (OEA) de servir más a los intereses de Estados Unidos que de los pueblos latinoamericanos y señaló que su misión de observación electoral en Bolivia asumió posiciones políticas y no legales.

De igual forma, Evo Morales aclaró que no pidió a ninguna institución de su país cometer irregularidades durante el proceso electoral y que incluso él mismo se dijo dispuesto a realizar nuevas elecciones.

Aseveró que cuando acusaron de “fraude” los comicios no tuvo “ningún problema” en que organismos internacionales e instituciones verificaran los comicios, entre ellos la OEA.

 

 

SJA