Fotografía: Ivet Pasquel
Ante la implementación del Instituto de Salud del Bienestar (INSABI), un grupo de integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) protestaron en el Hospital General de Pachuca y en las oficinas de los Servicios de Salud de Hidalgo, para exigir mejoras en los servicios de salud del estado.
A través de pancartas, los inconformes se manifestaron ante el desabastecimiento de medicamentos y por el cobro de cuotas de recuperación.
La decena de personas se plantó afuera del Hospital General, para exigir mejor atención médica para las familias más desprotegidas.
“Mejor atención a los pobres”, “No más cuotas”, “Sin medicinas no hay salud”, “Medicamentos gratuitos”, “La salud es un derecho constitucional”, fueron algunas de las exigencias de los inconformes.
Manuel Canales Pérez, integrante de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) en Hidalgo denunció que ante la transición del Seguro Popular al INSABI, hay desabasto de medicamentos y cobro de consultas.
Acusó que no hubo un diagnóstico o planeación para la implementación del modelo del INSABI, lo que provocó una serie de deficiencias en los servicios de salud.
Atribuyó la falta de medicamentos por las compras consolidadas que pretende el Gobierno Federal, aunque refirió que el Seguro Popular surtía el cuadro básico de medicamentos.
“Hoy ni el cuadro básico te dan, si el médico da una receta la persona tiene que salir a comprar su medicamento, no hay cobertura”, lamentó.
Otra de las irregularidades, denunció que se ha privatizado los baños en las clínicas y hospitales, además se quejó porque el albergue del Hospital General cobra una cuota de recuperación para alojar a los familiares de los pacientes.
Ante esta situación, los inconformes fueron atendidos por el titular de la Secretaria de Salud estatal, Marco Antonio Escamilla Acosta, a quien le expusieron sus demandas a efecto de les dé una solución.
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