Fotografía: Especial
Para los habitantes de Nopala, lavarse las manos constantemente, como una de las medidas para evitar contagios del coronavirus COVID-19, resulta una tarea difícil de cumplir luego de que comunidades como Borbollón, San Sebastián Tenochtitlán, El Sauz y Jagüey entre otras, sufren de desabasto de agua potable que ha sido un problema constante, sin embargo, debido a la contingencia sanitaria, la situación se ha agudizado.
Ante esta situación, representantes de las comunidades instaron al gobierno del estado a que intervenga con la finalidad de restablecer a la brevedad el servicio o proporcionar el vital líquido a través de pipas, por lo que también requieren de tinacos para el almacenamiento del líquido.
Andrés Pérez Vázquez, líder social en el municipio, indicó que en Antorcha Campesina “nos hemos dado la tarea de buscar la manera de apoyar a la población haciendo entrega de agua a través de pipas”
“La situación sí es preocupante como en otros municipios, en muchas ocasiones la gente tiene que comprar el agua hasta en 150 o 200 pesos para un tinaco de 1,100 litros y solo les dura dos o tres días; es urgente que el gobierno estatal sí vea el problema y lo resuelva, ellos tienen la posibilidad de hacerlo”.
Los hogares no son los únicos que padecen de agua, en las parcelas, los ganaderos y campesinos también han alertado de la escasez para el ganado y cultivos e incluso, informaron que la presa de Nopala se ha secado por completo e indicaron que hacía muchos años que eso no sucedía.
ENCA