Fotografía: Especial
Varios países europeos empezaron ayer a prohibir vuelos procedentes del Reino Unido, tras el descubrimiento de una variante más contagiosa de coronavirus que circula «fuera de control» en ese país y ante la cual la OMS pidió «reforzar los controles».
Siguiendo los pasos de Holanda, Bélgica e Italia anunciaron que también suspendían sus conexiones aéreas británicas.
El gobierno alemán se planteaba «seriamente» hacer los mismo con los vuelos procedentes de Reino Unido y Sudáfrica.
Estas medidas tienen lugar al mismo tiempo que un tercio de la población inglesa inicia un reconfinamiento, debido a una nueva cepa del coronavirus que circula «fuera de control», en términos del ministro británico de Salud, Matt Hancock.
El primer ministro británico, Boris Johnson, explicó el sábado que Londres y el sureste de Inglaterra debían volver a respetar un confinamiento estricto, en vísperas de las fiestas navideñas.
Frente a esta nueva cepa, la Organización Mundial de la Salud (OMS) instó a «reforzar los controles» en Europa.
A pesar de que hay una «incertidumbre considerable», Boris Johnson afirmó que la nueva cepa puede ser hasta un 70 por ciento más transmisible que las anteriores.
FMS
