Fotografía: Especial

Comerciantes del ramo de la venta de pescados y mariscos de la entidad, esperan no verse afectados de manera severa por la emergencia sanitaria por el COVID-19, ahora que inicia la cuaresma.

Y es que el temor de muchos es latente ya que cada año está temporada es la fuerte para ellos y sin ser negativos prevén que las ventas disminuya en un 40 por ciento.

Según comerciantes uno de los factores que podrían afectar sus ventas en esta pandemia, es la falta de dinero en los hogares.

Además aseguraron que estarán reforzando las medidas sanitarias para evitar la propagación del coronavirus y así les permitan vender sin problemas en esta cuaresma.

 

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