Fotografía: Especial 

Carlos Méndez Tejeda, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC) en Hidalgo, adelantó que solicitará apoyo a la Secretaría de Desarrollo Económico con créditos o fondos perdidos, así como condonación de impuestos a los ayuntamientos, para respaldar a los restauranteros que se vieron afectados por las inundaciones en Tula.

Señaló que los negocios del sector vienen arrastrando una crisis económica desde que inició la pandemia, y tras las pérdidas totales, consideró que sería empático poderles brindar ese respaldo.

«Estaremos proponiendo algunas estrategias como algunos créditos, o fondos perdidos, pero el tema de la reactivación económica tendría que ser pronta, quizá también la ayuda del municipio en condonación al Impuesto Sobre la Nómina o que las licencias de funcionamiento sean gratuitas», expuso.

Manifestó que aún no tiene un censo de los restaurantes o comercios ligados al gremio que resultaron con pérdidas totales, «pero la mayoría está en esa situación, pero en próximos días tendremos mayor información al respecto».

Informó que desde la semana pasada, empresarios restauranteros se unieron para recolectar víveres y artículos que se requieren en la zona afectada por el desbordamiento del Río Tula que provocó esta inundación, con el fin de apoyar a los damnificados.

«El acopio se realizó en una semana, y en diferentes restaurantes establecidos en Pachuca, y se lograron juntar, gracias a empresarios, colaboradores y ciudadanía, casi dos toneladas de ayuda entre alimentos, granos, semillas, comida enlatada, agua, leche en polvo, pañales y todos los víveres que se requieren», detalló.

Indicó que continuarán con la colecta de alimentos, de medicamentos y artículos de limpieza para sumarse a las acciones en apoyo a la sociedad de la región Tula-Tepeji.

Añadió que el sector continúa afectado por las restricciones sanitarias y no han logrado superar el 45 por ciento de ventas, pese a que continúan llevando a cabo los protocolos y medidas de bioseguridad.

Finalmente, confesó que les preocupa la llegada  invierno,  «porque no sabemos cómo afectará a esta situación que estamos viviendo ya que la economía está devastada».

 

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