Fotografía: Especial
Un amplio despliegue militar y policial se observó este domingo en Cuba tras el anuncio y realización de protestas programadas para este 15 de noviembre por parte de diferentes grupos civiles, quienes acusan represión.
Bajo consignas como «libertad» y «abajo la dictadura» estallaron nutridas manifestaciones en la isla, en el contexto de la peor crisis económica en 30 años, que atraviesa el país.
Las protestas fueron promovidas y difundidas ampliamente en redes sociales, como un hecho sin precedentes en el país gobernado por el Partido Comunista, donde comúnmente las únicas concentraciones autorizadas son las del partido en el poder.
Manifestantes señalaron que el gobierno se ha excedido en sus formas de querer acallar la protestas pues los líderes opositores se encuentran incomunicados y sus casas rodeadas por civiles y policías los que les impide salir, otros han sido secuestrados.
Ante estos actos de represión, diferentes personalidades han intentado ingresar al país para respaldar el movimiento, sin embargo no han podido llegar por orden del gobierno.
Además se ha impedido la entrada de parlamentarios europeos que buscaban observar la situación en la isla en momentos en que cubanos buscan protestar contra el gobierno de Miguel Díaz-Canel.
La activista Rosa María Payá ha denunciado la desaparición de varios opositores al régimen cubano.
«La negativa a la misión de observación corrobora la violencia de una dictadura que no quiere testigos. Los cubanos en nuestra delegación simplemente tenemos derecho a entrar a nuestro país y no vamos a parar hasta conseguirlo», señaló.
Indicó que tras estos movimientos la reunificación de la nación es indetenible, «porque el pueblo dentro y fuera está decidido a recuperar la Patria y la Vida» sentenció.
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