Fotografía: Especial
Para evitar una sobreexplotación del acuífero del Infiernillo ubicado en el municipio de Zimapán, por el envío de agua al estado de Querétaro, es necesario regular el suministro, por ello la diputada local, María del Carmen Lozano Moreno, pide que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) intervenga en este caso.
La diputada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) señaló que se debe exhortar a este organismo para que regule la capacidad de agua que se envía al estado de Querétaro, a fin de cuidar que los habitantes del municipio de Zimapán, quienes ya presentan problemas hídricos, puedan acceder también a este recurso.
Para esto solicita no solo una revisión de las autorizaciones otorgadas a este estado que extrae al día de hoy cerca de mil 500 litros de agua por segundo de este acuífero para beneficiar a 900 mil habitantes, a través del acueducto existente denominado “Acueducto II”.
Sino que también se rechace el proyecto para construir el “Acueducto III”, pues con esta obra que planea iniciar a finales de este año, el estado de Querétaro pretende llevarse 6 mil litros de agua por segundo de este mismo acuífero, explotación hídrica del acuífero hidalguense en beneficio del estado vecino que sería incongruente cuando hay problemas de agua en la región.
Incluso lamentó que hace más de diez años en que comenzó la construcción del “Acueducto II”, los habitantes del municipio de Zimapán pusieron como condición para explotar este acuífero que se construyeran obras hidráulicas para un aprovechamiento equitativo y en beneficio de ambos estados; pero esto no se cumplió y solo dieron vehículos.
Por si fuera poco, en el 2012 se presentaron denuncias en contra de las autoridades gubernamentales del estado de Querétaro por una mala administración del proyecto, e incluso, en el 2017 la propia Comisión Estatal de Agua Querétaro (CEAQ) advirtió sobre la disminución de tiempo de vida del acueducto debido a la falta de mantenimiento y los malos manejos en este proyecto, por lo que esta nueva obra se debe reconsiderar para evitar un estrés hídrico y problemas más severos.