Fotografía: Especial
La viceministra de Defensa de Ucrania, Anna Maliar, anunció este sábado que ya no hay fuerzas rusas en la región administrativa que rodea a la capital ucraniana, Kiev.
“Irpin, Bucha, Gostomel y la región de Kiev al completo han sido liberadas del invasor”, aseveró Maliar en su cuenta oficial de Facebook.
En las últimas horas las tropas ucranianas recuperaron una treintena de poblaciones de la región, según el portavoz presidencial Oleksii Arestovich, quien advirtió que aún “quedan por delante duras batallas” en el sur y en el este del país, según recoge la televisión pública ucraniana.
El Ministerio de Defensa ucraniano informó que las fuerzas ucranianas tomaron el control de localidades como Bucha o Brovari y además que las fuerzas rusas se retiraron del aeropuerto Antonov de Gostomel, donde permanecieron atrincheradas durante varias semanas.
Estos avances ucranianos encajarían con la declaración de Moscú de que desistiría de su ofensiva en la región de Kiev y de Chernígov para concentrarse en el este del país. Así, fuentes ucranianas citadas por la agencia de noticias DPA hablan de bombardeos rusos sobre fábricas y zonas industriales de Mariúpol, Járkov y Ghernigov.
Pese a la defensiva del Kremlin, las bajas entre las fuerzas rusas no se informan ampliamente en dicho país, pero utilizando información de fuentes abiertas, la BBC informó que al menos 39 miembros del Regimiento 331 de élite de Rusia han muerto, elementos especiales que Moscú envió para la invasión ucraniana.
En territorio báltico, cerca de 213 personas fueron arrestadas por protestas en contra de la guerra en una jornada de manifestaciones hechas este sábado en 17 ciudades; hubo un gran numero de detenidos en Moscú y San Petersburgo.
YOG