Fotografía: Especial

 

 

Ucrania denunció que Vladimir Putin se valió de armas químicas para tomar la ciudad portuaria, casi en ruinas; autoridades culparon a las fuerzas rusas de haber utilizado una “sustancia venenosa de origen desconocido” para tomar la planta de siderurgia y metalurgia Azovstal, a las afueras de Mariúpol.

Si bien estas declaraciones no han sido confirmadas, la Unión Europa, Estados Unidos, Reino Unido y Austria iniciaron investigaciones para determinar la falsedad o veracidad del supuesto atentado en contra de civiles y militares de Mariúpol.

“Estamos trabajando urgentemente con nuestros socios para verificar los detalles. Cualquier uso de tales armas sería una escalada insensible en este conflicto y haremos que Putin y su régimen rindan cuentas”, aseguró en la red social Twitter la ministra británica de Relaciones Exteriores, Liz Truss.

Por su parte, la milicia separatista de Donetsk y Rusia negaron haber utilizado armas químicas para asaltar la planta.

Agravios que sí han sido confirmados, son los ataques sexuales a mujeres ucranianas por parte de soldados rusos.

Volodímir Zelensky ha denunciado «cientos de casos de violación» en las zonas que ocupó el ejército ruso, «incluyendo niñas menores de edad y niños muy pequeños». El número exacto de víctimas se desconoce; Zelensky ha pedido a la ONU investigue los casos.

 

YOG