Fotografía: Especial
La mañana de este lunes se dio a conocer que un juez le concedió a Miguel Ángel Félix Gallardo, exlíder del Cártel de Guadalajara, la prisión domiciliaria, quien permanecía en el penal de Puente Grande, en Jalisco.
El narcotraficante llevaba preso desde 1989 por el asesinato de Enrique Camarena, agente de la Agencia Estadounidense Antidrogas (DEA), aunque también es señalado por delitos de narcotráfico.
El 5 de enero de 2022, los abogados de “El Jefe de jefes” impugnaron la sentencia que rechazó ampararlo contra el pago de reparación del daño de 20 millones 810 mil pesos a las familias del agente Camarena.
Miguel Ángel Félix Gallardo marcó un antes y un después en la historia del narcotráfico en México.
Se convirtió en el zar de la cocaína al ser el primero en traficarla a Estados Unidos; inauguró los contactos con los narcos colombianos; diseñó y controló las principales rutas de trasiego de droga en el país.
Fue en agosto de este año cuando reapareció frente a las cámaras para una entrevista con Telemundo.
El excapo narró su vida tras 32 años preso en el penal federal de Puente Grande; estaba en silla de ruedas y ciego de un ojo.