Fotografía: Ricardo León

 

El Xantolo o celebración de Día de Muertos es una fiesta de origen prehispánico en que las ánimas de los difuntos regresan a casa, al mundo de los vivos, para convivir con los familiares y para nutrirse de la esencia de los alimentos que se les ofrece en los altares puestos en su honor.

Considerada la fiesta más grande, la cual se realiza en la Huasteca hidalguense  y en distintos municipios del estado de Hidalgo, el Xantolo es una tradición viva y son muchos los municipios y comunidades de la Sierra y la Huasteca hidalguense donde se centran los festejos del Día de Muertos. El Xantolo, que significa Fiesta de Todos los Santos, es la más importante en esta región, una tradición muy arraigada.

Durante estas festividades, la secretaria de Turismo, Elizabeth Quintanar Gómez, acompañó al gobernador a diferentes actividades en donde los habitantes rinden peculiar culto a los muertos, les recuerda y venera de manera especial.

El 31 de octubre recibieron a los pequeños difuntos o también llamados angelitos, a ellos les ofrecieron juguetes, dulces, chocolates y detalles infantiles, además de la comida que más les gustaba.

El 1 de noviembre es día de Todos los Santos y el 2 de noviembre es la llegada de todos los Fieles Difuntos halagados con cohetes, flores, veladoras encendidas y rezos.

Este año destaca una importante afluencia de visitantes y turistas de distintos puntos del país y del mundo,  quienes vivieron esta fiesta en territorio hidalguense.

En Ixmiquilpan, corazón del Valle del Mezquital, por primera vez y como parte de las actividades efectuadas para conmemorar el Día de Muertos, realizaron el primer concurso de elaboración de tapetes.