Fotografía: Especial
Aproximadamente son 23 municipios hidalguenses los que están más relacionados con el robo de hidrocarburo, donde se han detectado tomas clandestinas.
Aunque el principal municipio donde se cuenta con resistencia por parte de la base social, para luchar contra este delito, es Cuautepec, seguido de Ajacuba.
Así se dio conocer a través de una rueda de prensa el comandante de la 18va Zona Militar, Juan José Gómez Ruiz.
Y mencionó a Cuautepec encabezando la lista de municipios con más tomas con un total de mil 133; seguido por Ajacuba, Tula de Allende, San Agustín Tlaxiaca, Atotonilco de Tula, Singuilucan, Atitalaquia, Tepeapulco, Tetepango, Tlaxcoapan y Nopala.
Además de Epazoyucan, Santiago Tulantepec, Chapantongo, Tlahuelilpan, Tepetitlán, Pachuca, Tlanalapa, Tepeji, Mineral de la Reforma y Tezontepec de Aldama.
Gómez Ruiz señaló que en total durante 2022 4 mil 935 tomas clandestinas.
Y a la desviación volumétrica también lo encabezó Cuautepec de Hinojosa con 90 mil 154 barriles, después le siguió Nopala de Villagrán con 73 mil 835 barriles y Tula de Allende 72 mil 22barriles.
A través de una lectura extensa que hiciera el secretario de gobierno Guillermo Olivares Reyna, afirmó que hay sanciones bastantes severas que tienen que ver con los hidrocarburos.
«Y en principio para quien sustraiga, sin tener derecho para ello, de que la penalidad está severa, que va de 20 a 30 años de prisión y multas muy severas de 20 mil a 25 mil veces el valor de la unidad de medida y actualización vigente», explicó el funcionario estatal.
Gómez Ruiz aseguró que la temeridad de quienes realizan este acto ilícito no tiene medida, pues sabían que el ordenamiento legal en caso de ser sorprendidos conllevaría una pena muy severa, sin embargo, en Hidalgo no se reflejó la reducción de dichas conductas ilícitas.
Externó que a diferencia de años pasados, ahora hay una total coordinación entre las dependencias de seguridad del Gobierno Federal, Estatal y municipal.
Resultado es que se tienen cifras históricas de incautación de hidrocarburo que se diera en días pasados, como en Santiago Tulantepec.
«Quiere decir que estamos construyendo la paz, que estamos abonando a que los ilícitos se disminuyan, a que nuestra juventud no aprecie es actividad como algo normal, a que se aleje también de otras acciones, como son las adicciones», explicó.
