Fotografía: Especial
Conservar las tradiciones que nos enorgullecen e identifican con nuestras raíces, es primordial para todos los hidalguenses, afirmó el gobernador Julio Menchaca en compañía de su esposa Edda Vite Ramos, presidenta del patronato del Sistema DIFH, al encabezar el inicio de la temporada de carnavales en la entidad.
Con la presentación de la ‘Danza del fuego’ una de las tradiciones más antiguas del municipio de Huehuetla y el trío de Cantores del Pueblo Viejo, las cuadrillas y comparsas provenientes de al menos 50 municipios, realizaron su recorrido por diferentes calles de la capital hidalguense en la que dieron una pequeña muestra de la esencia de los pueblos originarios, que han regalado su historia y cultura a la entidad.
Calnali, Mineral del Chico, Cuautepec de Hinojosa, Metepec, Alfajayucan, Nopala Atitalaquia, Atotonilco de Tula, Huautla, Ixmiquilpan, Tezontepec de Aldama, el Arenal, Atotonilco el Grande, Molango, Tianguistengo, Zacualtipán, Omitlán, Acaxochitlán, Chilcuautla, Jacala de Ledezma, San Felipe Orizatlán, Tenango de Doria, Tlaxcoapan, San Bartolo Tutotepec, Atlapexco, Huehuetla, Eloxochitlán, Mixquiahuala y Pahuatlán, municipio del estado de Puebla, invitaron a la celebración de sus respectivos carnavales.
De igual forma, las y los asistentes disfrutaron la presentación de la comparsa de la colonia La Raza, de la capital hidalguense, en honor a sus habitantes que provienen de diferentes regiones indígenas del estado y que se asentaron en esa zona.
Además, como parte de la fiesta llena de colorido y de la riqueza cultural de Hidalgo, las personas asistentes degustaron del pan de nata de Tizayuca, burras y cocoles de anís de Zempoala, panecitos de San Felipe Orizatlán y Tianguistengo, zacahuil de Calnali, pancita de res de Francisco I. Madero, guajolotes de Tulancingo, pollo al disco de Cuautepec, pulque de Apan, tamales de xala de San Agustín Metzquititlán, enchiladas aguadas de Mixquiahuala y el tradicional plato huasteco de Huejutla.