Fotografía: Captura de pantalla

La Secretaría de Salud estatal aclaró que uno de los elevadores del Hospital General de Pachuca, tuvo una repentina interrupción eléctrica, volviéndose a incorporar dos minutos más tarde, abriendo sus puertas con un desnivel de 3 a 5 cm.

De acuerdo con el comunicado, el elevador era ocupado por una enfermera quien reportó crisis nerviosa tras el incidente, quien en ningún momento su integridad física estuvo en riesgo.

Se informó que los elevadores del Hospital General cuentan con una estricta bitácora de mantenimiento efectuada por la empresa Schindler México, quien atiende de manera inmediata los desperfectos, como en el presente caso, en el que técnicos de la misma, después de su revisión, y de manera preliminar, determinaron que en el elevador no encontraron evidencia de alguna falla mecánica, quedando este evento relacionado con el suministro eléctrico.

El elevador continuará operando de manera regular una vez que de nueva cuenta se verifique y constate su perfecto funcionamiento. Estos eventos de manera rutinaria se deben de reportar al Ministerio Público por procedimiento administrativo.