Fotografía: Especial
A lo largo de los meses, la presencia de casos y defunciones por COVID-19 han presentado un ascenso, de manera que en este momento Hidalgo se encuentra en una fase “sumamente” activa y con una transmisión acelerada de los casos, informó Diana Reyes Gómez, subsecretaria de Salud Pública de Hidalgo.
Mencionó que las mesetas de la curva epidémica se han visto interrumpidas por eventos que marcan un incremento en la transmisión social por factores religiosos, sociales, políticos o económicos, lo que ocasionó un repunte sostenido de los casos a partir de octubre y noviembre.
Detalló que las complicaciones que se presentan en los pacientes con comorbilidades, provocan un incremento sostenido en los casos hospitalizados, lo que representa un riesgo inminente de saturación hospitalaria y de colapso de los servicios de salud.
En este sentido, apeló por el reconfinamiento de los casos para inhibir la propagación de virus y pidió a la población que se mantenga en casa y en caso de salir, recomendó conservar la sana distancia, realizar el efectivo lavado de manos y el uso correcto del cubrebocas.
Aseguró que el control de pandemia está “en nuestras manos”, por lo que insistió que a través de sencillas medidas sanitarias se pueden contener los casos de COVID-19.
Explicó que la vacuna es una medida de prevención, “un respiro”, pero pidió ser conscientes que desde la producción hasta la aplicación implica tiempo, por lo que “no podemos estar aferrados o a la expectativa”.
“La vacuna no debe representar un distractor, debemos seguir con las medidas de prevención y no debemos bajar la guardia”, finalizó.
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