Fotografía: Especial
Miles de personas tomaron las calles en varias ciudades de Perú para exigir nuevas elecciones y la liberación del expresidente Pedro Castillo, detenido bajo acusación de rebelión y conspiración por la fiscalía peruana tras un fallido autogolpe.
Las protestas iniciaron después de que el Congreso, dominado por la derecha, destituyera al izquierdista Castillo y asumiera el mando del país la vicepresidenta Dina Boluarte.
En Lima las protestas se han concentrado alrededor del Congreso y los seguidores de Castillo exigen que sea disuelto tal y como él anuncio el miércoles y que a la postre significó su muerte política.
La policía andina ha tenido que emplear gases lacrimógenos para disolver las protestas mientras que los manifestantes culpan a la nueva presidenta de estar detrás de la represión policial.