Fotografía: Especial

 

Tras 18 meses, Dinamarca vive la recompensa a esfuerzos y sacrificios por un duro confinamiento a sus casi 6 millones de habitantes.

La administración de la primera ministra socialdemócrata, Mette Frederiksen, ha eliminado todas las restricciones introducidas para luchar contra el coronavirus y, con ello, ha dado fin a la emergencia sanitaria, convirtiéndose en el primer país europeo en hacerlo.

“Sigue habiendo seguimiento de contactos y recomendaciones para continuar aplicando las pruebas en diferentes entornos, como el escolar”, explicó Henrik Ullum, director general del Statens Serum Institut.

“Todavía se aconseja al público que tome precauciones para evitar la transmisión del Covid-19. Pero, en general, sí, hay un regreso a la normalidad, con las restricciones prácticamente eliminadas”, confiesa.

El profesor que tiene a su cargo el organismo nacional encargado de dar respuesta a las amenazas infecciosas y biológicas, afirma que el “trabajo colectivo” es el secreto detrás del éxito danés.

El estado escandinavo hizo la transición a la normalidad registrado en promedio 325 nuevos casos de infección diarios, tres muertes y una cobertura completa de vacunación de 84% de la población.

Con información de El Universal

FMS