Combate la guerra con paz
Desde antier, al escuchar en el noticiero lo lamentable que es la guerra en Ucrania, la mayoría de nosotros emitimos opiniones al respecto e incluso pudimos haber entrado en controversia con personas que no tienen la misma opinión política o social al respecto de la guerra.
Eso es lo menos importante, lo más lamentable es que no coincidimos que la guerra nace del corazón de cada uno de nosotros.
Podemos expresar que hay duelo en nuestro corazón porque se están matando seres inocentes, se supone que el diálogo prevalecería para evitar esta masacre y sin embargo, cada vez es más fuerte causando angustia y preocupación.
La paz de cada uno sigue estando amenazada porque no comprendemos que el universo es de paz, no de guerra; el universo es de todos, no de algunos; el universo da a todos por igual, no con distinciones; el universo hoy clama a que la violencia de las armas se combate con el amor, la tolerancia, el respeto y la paz.
La causa de esta guerra entre naciones tiene su origen en el sentido de pertenencia y el rechazo.
Es tan fácil la aceptación entre unos y otros; sin embargo, como es un evento a nivel mundial se hace grande y causa impacto, pero ¿qué nos pasa en el interior de nuestro corazón? Quizá encontremos más rechazo y guerra que lo que estamos viendo en el mundo.
Queremos combatir un incendio echándole gasolina, la guerra también comenzó por enemistades y nos causa asombro; sin embargo, nosotros estamos enemistados con el vecino, con la cuñada, con la compañera de trabajo.
Todo esto contribuye a que se vayan acumulando moléculas de guerra, comenzando en un entorno pequeño y permeando en el mundo.
En conclusión, la causa de la guerra eres tú, soy yo; cuando no privilegiamos la dignidad humana a través del respeto, la aceptación y el amor por los demás.
Combatamos la guerra con la paz que sabemos dar por naturaleza y evitemos conflictos que causan miles de muertes.
La paz esté en el mundo.