Fotografía: Especial
Aunque en el segundo debate disminuyeron los ataques entre las candidaturas a la gubernatura hidalguense, el tiempo se usó preferentemente para evadir las preguntas ciudadanas, reciclar discursos, plantear propuestas poco claras, hacer autoproclamaciones, responder alusiones e incluso hubo coincidencia de ideas.
Durante el segundo debate que organizó el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH), los temas que debían abordarse a detalle atendían al rubro de obra pública, derechos de los pueblos y comunidades indígenas, así como educación; sin embargo, las candidaturas poco o nada se enfocaron en el tema o la pregunta.
De estrada los cuatro coincidieron en su apoyo al magisterio hidalguense y aseguraron que velarán por los docentes.
Ls coincidencias en proyectos se dieron entre José Luis Lima y Julio Menchaca, respecto que la ejecución de la obra pública sea con materiales de la región.
Entre Carolina Viggiano y Francisco Berganza coincidieron en la necesidad de impulsar la presa en Tultitlán, así como otorgar más becas a la juventud.
Respecto de la casa destinada para uso exclusivo del gobernador, Menchaca y Berganza refirieron que es un dispendio y se le debe de dar otro uso: el primero refirió que para crear un museo, el segundo para convertirlo en un centro de rehabilitación para personas con discapacidad.
Aunque con esquemas y estructuras diferentes, Carolina, Francisco y Julio destacaron la necesidad de tener mayor contacto con la ciudadanía para la elaboración de proyectos locales oportunos sin necesidad de improvisar desde el gobierno estatal, sino partir de las necesidades regionales.