Fotografía: Cris Huerta

 

Una de las tradiciones más representativas de México es la colocación de ofrendas para recordar a quienes ya partieron, y entre los elementos que no pueden faltar está el papel picado, uno de los cuatro símbolos más importantes dentro del altar.

De acuerdo con Víctor Espitia, comerciante ubicado en la calle Morelos de Pachuca, “el papel picado significa aire y simboliza la fragilidad de la vida”.

Cada año, durante estas fechas, Víctor se dedica a vender este colorido adorno que da vida a las ofrendas.

En entrevista para Al Día Noticias, comentó que inicia la venta de papel picado desde el 10 de octubre, ya que “hay gente que pone sus altares desde antes, al igual que a los niños en las escuelas les empiezan a pedir el papel picado para poder adornar las ofrendas en las escuelas o sus salones”.

Sobre las ventas de este año, señaló que “gracias a Dios van bien”, pues aunque muchas personas enfrentan dificultades económicas, “siempre compran el papel picado”.

El comerciante detalló que maneja diferentes tamaños, desde los más pequeños de aproximadamente 5 centímetros, hasta los más grandes de un metro.

Los precios varían: desde un peso hasta 10 pesos, dependiendo del tamaño y el material, mientras que los metálicos pueden llegar a costar hasta 60 pesos.

“El papel que más se vende es el mediano, que tiene un tamaño aproximado de 50 centímetros por 35 centímetros y lo damos a un peso”, explicó.

Añadió que, pese a la ganancia mínima, lo importante es mantener la tradición viva: “Aunque sea poquito que nos ganamos, pero la gente se va contenta con el precio”.

Finalmente, mencionó que los días de mayor venta son el 29, 30 y 31 de octubre, así como el 1 de noviembre, cuando las familias acuden a realizar los últimos preparativos para sus ofrendas.