Fotografía: Especial

 

La tercera posición del Gran Premio de Austria quedó amarrada por el piloto mexicano Sergio Pérez en una carrera que de nueva cuenta fue ganada por su coequipero y líder del campeonato de Fórmula Uno, Max Verstappen. Charles Leclerc fue segundo.

 

Luego de una mala clasificación Checo arrancó desde la posición 15 tras ser eliminado en la Q2 por lo que arranca fuera del top 10 y pudo ir escalando lugares gracias a un Safety Car por el abandono de Nico Hulkenberg.

 

La estrategia de Red Bull Racing con Sergio Pérez resultó acertada, pues el mexicano le sacó provecho a las condiciones de la carrera para dar la batalla hasta el final con Carlos Sainz, de Ferrari, y Lando Norris (McLaren), y meterse en las primeras tres posiciones.

 

A Checo le favorecieron las penalizaciones del propio Sainz y Hamilton, quienes por exceder los límites de pista fueron sancionados con cinco segundos.

 

En las últimas vueltas de la carrera la atención se centró en la pelea entre Sainz y Checo por el último lugar del podio, y aunque el español se defendió en varias ocasiones impidiendo el rebase del tapatío, por fin en el giro 62 se concretó.

 

Pérez estuvo cerca de ser penalizado tras ser advertido en dos ocasiones por exceder los límites de pista, pero finalmente se quedó con la tercera posición.

 

 

ECRL