Fotografía: Especial

Ante el intento de linchamiento que se suscitó el día de ayer en la comunidad de Huitzila, en el municipio de Tizayuca, en donde una multitud de habitantes agredió físicamente a dos sujetos que fueron descubiertos en flagrancia al intentar robar un automóvil particular, el alcalde, Gabriel García Rojas, hizo un llamado a la población para evitar hacer justicia por su propia mano.

Tras asegurar que cuando suceden hechos de violencia colectiva como los que se han suscitado a nivel nacional, en los que se han cometido homicidios en contra de personas inocentes, el presidente municipal, manifestó que está consciente de que la inseguridad que se vive en el país, ya ha originado un hartazgo entre la población por lo que actúan de esta forma, pues ven vulnerada su integridad física y familiar, además de su patrimonio.

Pero precisó que es necesario que la ciudadanía entienda que ante un hecho delictivo detectado en flagrancia, es mejor solicitar el apoyo de las autoridades correspondientes para que se actúe de manera legal conforme lo marca la jurisprudencia, pues cuando participan en hechos de violencia colectiva al final ellos también terminan convirtiéndose en delincuentes al atentar contra la vida de alguien.

Cabe destacar que estos sujetos quienes responden  a las iniciales de E.E.P y P.E.P.M., son  vecinos de la misma comunidad y de acuerdo a los habitantes están relacionados con varios hechos delictivos, por ello su actuar hacia ellos, pues se dicen cansados de sus fechorías.

Sobre lo sucedido ayer, se  informó que los inculpados que viajaban a bordo de una motocicleta Italika, color rojo sobre la calle 16 de Enero, cuando intentaron robar un automóvil Toyota, Corola, color blanco, con placas del estado de Hidalgo, sin embargo, tras la negativa del conductor los asaltantes dispararon en dos ocasiones y escaparon con dirección al centro de la comunidad donde fueron interceptados por los habitantes quienes los golpearon, pero en su intento por escapar los ladrones volvieron a disparar, pero fueron sometidos por los pobladores y finalmente los entregaron a las autoridades municipales.

 

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