Fotografía: Ivet Pasquel

Madres de familia apenas se acostumbran a levantarse temprano después de una semana del regreso a clases de sus hijos.

Como cada año, el regreso a clases es una de las temporadas en las que se compromete una gran parte del presupuesto familiar, esto aunado a que los padres deben levantarse más temprano para llevar a sus hijos a la escuela.

En ese sentido Carolina Chávez explicó que en vacaciones ya se había acostumbrado a levantarse a las 9 de la mañana y con  el regreso a clases de sus hijos se levanta a las 6 y media.

«Hay que meter a los chamacos a bañar y hacerles el desayuno y lo que se van a llevar de lunch, es un relajo pero ahí vamos».

Por otra parte Eusebia Juárez dijo que lo que más le pesa son los gastos pues a una semana de que sus hijos están en la escuela, aún no se repone de las deudas por comprar uniformes y libros.

Ana María también comentó que le gustaría que sus hijos entrarán más tarde a la escuela pues ella se desvela incluso para ayudarles a la tarea.

«Luego que piden que forremos los cuadernos y que los cosamos y todavía les dejan mucha tarea pero se hace lo que se puede», aseguró.

 

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