Fotografía: especial
Las nuevas medidas de austeridad implementadas por Luis León Espíndola, tesorero municipal de Tepeapulco, ponen en riesgo la salud de los ciudadanos que acuden a los eventos públicos del alcalde Alfonso Delgadillo, ya que durante estos actos se distribuye agua embotellada, pero contaminada.
Trascendió que desde la llegada del León Espíndola a la tesorería municipal, la hacienda pública se ha visto afectada a grado tal que cada una de las áreas carecen de la falta de equipamiento y suministros para el diario accionar de las direcciones y coordinaciones municipales, mismas que carecen hasta de insumos básicos como papelería.
Se dio a conocer que en los diversos eventos públicos encabezados por el presidente municipal, José Alfonso Delgadillo López, incluso aquellos a los que asiste el gobernador Omar Fayad o algún funcionario estatal o federal, son repartidas entre los asistentes botellas de agua «purificada» de 325 mililitros, con agua verdosa y contaminada.
Incluso se informó que los propios regidores le han reclamado al titular del municipal por la distribución de «el agua verdosa», hecho que sólo ha provocado la burla Delgadillo López mientras él consume agua Bonafont.
Cabe destacar que este medio cuanta en su poder con algunas de las botellas que son regaladas a la ciudadanía y que reflejan los dichos anteriores y cuya adquisición la sido autorizada y avalada por el tesorero municipal quien pone en riesgo a los tepeapulquenses y podría crear un problema de salud púbica.
Este tema va de la mano de la dudas que existen sobre la calidad de cloración del agua municipal, que por cierto está a cargo de un empresario y regidor, el priísta Jorge García Fernández, en quien recae la duda sobre los diversos negocios poco claros en el área del agua potable municipal y el desaparecido crédito de 6 millones de pesos que otorgó Banobras a Tepeapulco y del cual ahora nadie sabe nada.
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