Fotografía: Especial 

 

El Papa Francisco ofreció una misa en la Plaza San Pedro del Vaticano, totalmente vacía, para pedir por el mundo ante esta pandemia de coronavirus.

Aseguró que toda la humanidad está en el mismo barco intentando superar la tormenta que desató la pandemia de coronavirus​ y que es necesario «remar juntos».

Esta es la primera vez en la historia de la Iglesia católica que el Papa reza en solitario ante la inmensa plaza vacía de San Pedro.

Después de señalar que la crisis mundial desatada por el avance de la pandemia muestra un vacío desolador que arrasa con todo a su paso insistió en la necesidad de ser solidarios.

«El señor nos interpela y en medio de la tormenta nos invita a activar la solidaridad, capaz de dar sentido en estas horas en la que todo parece naufragar», enfatizó Francisco, bajo la lluvia.

Al terminar la homilía, el Papa Francisco rezó frente a un crucifijo que habitualmente está en la iglesia San Marcelo del Corso, en el centro romano, al que se le atribuye la sanación de la gran peste de 1522.

La imagen del Papa rezando solo en la plaza, por el fin de la guerra contra un enemigo invisible que ha causado 25 mil muertes, se volvió viral en redes sociales e impactó incluso a personas que se dicen agnósticas.

 

 

SJA