Fotografía: Especial

 

Trabajadores sindicalizados de Teléfonos de México (Telmex) emplazarán a huelga para el próximo 10 de noviembre a mediodía a nivel nacional, con el fin de continuar exigiendo la jubilación a personal de nuevo ingreso, situación que se negociará en mesas de trabajo en próximos días para evitar esta situación.

De acuerdo a un trabajador de confianza de esta empresa en Hidalgo, quien decidió mantener su nombre en anonimato, señaló que actualmente los jubilados que laboraron para la empresa reciben su pago, pero a partir del nuevo acuerdo se especifica en el contrato colectivo que la empresa no cuenta con una situación financiera viable para ofrecer esta prestación a los trabajadores de nuevo ingreso.

Motivo por el cual, el Sindicato de Telefonistas de las República Mexicana amenaza con levantar las banderas rojinegras en cada una de las 392 tiendas Telmex que hay en el país, incluyendo las nueve que hay en Hidalgo.

«El año pasado se tomó el tema de las jubilaciones y es que resulta que Telmex, últimamente ha salido en números rojos, por lo que no ha habido reparto de utilidades y obviamente está dejando de ser rentable, pero el sindicato ha tenido mucho beneficios durante años sobre todo cuando la empresa se hizo privada», indicó la fuente.

Expuso que esta situación, por la que trabajadores de la empresa han colocado cartulinas con mensajes de protesta en las tiendas, tiene como punto medular las jubilaciones a personal de nuevo ingreso.

«Reitero que la empresa ya no tiene viabilidad financiera, no hay liquidez, ya no es viable», debido a que, después de la disposición oficial de junio de 2012, Telmex no puede cobrar a sus usuarios el servicio de larga distancia, lo que provocó que la empresa dejará de percibir los 2 mil millones de pesos mensuales que adquiría por este servicio.

Indicó que es factible que los trabajadores sindicalizados se vayan a huelga hasta que se llegue a un acuerdo, pero debido a que el sector de las telecomunicaciones no puede parar, de realizarse la huelga, el gobierno federal deberá de intervenir para que la empresa labore sin personal sindicalizado y garantizando el servicio a la sociedad.

En Hidalgo, actualmente hay 32 trabajadores que son subcontratados y unos 500 sindicalizados que laboran en tiendas ubicadas en Pachuca, Tulancingo, Tizayuca, Ixmiquilpan, Apan, así como en Ciudad Sahagún, por lo que los trabajadores de confianza se preparan para trabajar fuera de las instalaciones para solucionar problemas y ofrecer servicio en caso de que estalle la huelga.

«Sabemos que la empresa respeta estas peticiones laborales, siempre ha sido respetuoso, pero de haber huelga será un caos», concluyó.