Fotografía: Especial

 

El próximo 31 de diciembre concluirá el periodo de Armando Roldán Pimentel, tras estar cinco años como titular de la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo (ASEH), tiempo en el que presentó un total de 10 denuncias por un monto de más de 40 millones de pesos y ahora el Congreso local tendrá que emitir la convocatoria para hacer la nueva designación.

Roldán Pimentel fue electo el pasado 14 de noviembre de 2017 luego de haber participado en la convocatoria pública que emitió el Congreso local tras la renuncia del entonces auditor, José Rodolfo Picazo Molina, quien fue electo para ocupar el cargo del 1 de enero de 2015 al 31 de diciembre de 2022, por lo que su labor, era concluir este tiempo.

De modo que en este tiempo que ha estado al frente del órgano fiscalizador, se han promovido 10 carpetas de investigación ante la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) porque no se logró comprobar el destino de más de cerca de 40,958,496 pesos.

Este monto pertenece a las cuentas públicas de 2016 a 2018 únicamente, en donde los municipios afectados en su patrimonio fueron Alfajayucan, Santiago de Anaya, Tula de Allende, Apan, Atotonilco de Tula, Mineral de la Reforma, Tezontepec de Aldama y Tlahuelilpan. De estos dos municipios se dio vista a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) para que le diera seguimiento por tratarse de recursos federales.

En todas estas denuncias, el auditor estatal recalcó que debido a la falta de pruebas, se llegó a la conclusión de que se realizaron desvíos de recursos y eso es una afectación a la hacienda pública. Y aunque la ASEH desconoce a ciencia cierta el estatus de estas denuncias, colabora puntualmente cuando la autoridad responsable lo ha solicitado.

Por otro lado, de acuerdo a la Ley de Fiscalización Superior y Rendición de Cuentas del Estado de Hidalgo, la Comisión Inspectora de la Auditoría Superior del Estado del Congreso local, deberá de emitir una convocatoria pública para recibir las solicitudes, analizarlas para elegir a quienes pasan a la fase de entrevistas.

Posteriormente se presentará el dictamen con una terna de finalistas que se someterá a votación del pleno para que se elija al mejor perfil y que cuente con el voto de las dos terceras partes de las y los diputados presentes para finalmente tomarle la protesta de ley.