Fotografía: Especial
La primera etapa para que la Procuraduría se convierta en la Fiscalía General de Justicia del Estado de Hidalgo (FGJEH) consiste en la ampliación de los recursos humanos, pues es necesario fortalecer las capacidades administrativas para abatir el rezago existente.
Octavio Magaña Soto, diputado presidente de la Primera Comisión Permanente de Seguridad Ciudadana y Justicia del Congreso local, explicó que durante este primer año para llevar a cabo la transición, se están destinando los recursos extraordinarios que se aprobaron, que de acuerdo al presupuesto de egresos local son más de 238 millones de pesos.
El legislador local advirtió que este recurso es para regular algunas plazas, que son una demanda laboral de hace muchos años, aunque también para realizar algunas nuevas contrataciones ya que para combatir el rezago en la atención de las carpetas de investigación anteriores y nuevas se necesitan más personas.
Ante este escenario, refirió que esta transición va en tiempo forma, pues recordó que el proceso está programado para dos años, y en 2024 iniciará la segunda y última etapa, la cual consistirá en cambiar la situación jurídica de los bienes muebles para que dejen estar en manos del gobierno estatal y pasen a la Fiscalía.
De igual modo se contempla la compra o ampliación de algunos edificios, capacitaciones, entre otros aspectos para tener una Fiscalía fuerte que pueda combatir los delitos de alto impacto de forma eficiente.
En este sentido, Magaña Soto refirió que se estima que esta transición cueste 700 millones de pesos, pero que servirán para contar con más y mejores agentes, pues anteriormente se castigaba a la Procuraduría en materia económica, pues lo que se les asignaba era solo para mantenerse, por lo que hoy este trabajo buscará rescatar y fortalecer a la institución.