Fotografía: Especial
La familia Reyes Robles aceptó la disculpa pública voluntaria institucional que realizó Ana Karen Parra, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), tras el caso de discriminación contra su hijo menor de edad en 2018, aunque esperan que esto siente un precedente real.
Parra Bonilla señaló que si bien esta acción no formaba parte de la recomendación número 81 que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en diciembre de 2020, se debe reconocer que la administración anterior actuó de manera inadecuada e insuficiente en la investigación de los actos discriminatorios contra el infante A.D.R.R.
Todo ocurrió en 2018 cuando se presentó una queja para denunciar los hechos violatorios de derechos humanos cometidos en agravio del niño de ocho años de edad, quien tiene Síndrome de Down y fue discriminado por personal del Centro Estatal de Alto Rendimiento (CEAR) deI Instituto Hidalguense del Deporte (Inhide).
Ante esto, la CDHEH inició el expediente de la queja, pero para el 9 de agosto de 2019 se emitió un acuerdo en el que determinó la conclusión de las investigaciones porque a su decir no se acreditó la violación a los derechos humanos y consideró que ubicar al niño en un “grupo de deporte adaptado” fue un ajuste razonable.
Por estos hechos, Parra Bonilla refirió que la postura que asumió en ese momento la comisión fue mala, la cual estaba dirigida en ese entonces por Alejandro Habib, posteriormente Javier Ramiro Lara también desestimó el caso.
Por lo que se inició una serie de demandas ante diversas instancias federales, donde en todas se confirmó una vulneración de derechos, menos en el plano local.
Ante esto, el padre de familia del infante afirmó que aunque la familia acepta la disculpa pública, porque reconoce que el primer paso para mejorar es asumir los errores cometidos, espera que esto se traduzca en acciones concretas para evitar la repetición de los hechos.