Fotografía: Ivet Pasquel
El delegado será un empleado del gobierno federal, al contrario, el gobernador es el soberano que el voto directo de la ciudadanía por mayoría eligió, puntualizó, Omar Fayad Meneses, gobernador de Hidalgo.
“No veo ni un punto de comparación con la figura de un delegado, con la figura del gobernador, son dos cosas diametralmente distintas”, subrayó.
En este sentido, descartó que la figura del “súper delegado” venga a competir con la figura del gobernador de Hidalgo.
“No le veo la disputa, ni le veo la diferencia, no se va a parecer en nada a la figura del gobernador, al contrario, será quien represente los intereses del gobierno federal en Hidalgo”, destacó.
El mandatario hidalguense rechazó que le preocupe que el presidente electo de México determine desaparecer las delegaciones o que se instituya una súper delegación, que será su representación en el estado.
Al contrario, manifestó que si el delegado que sea asignado viene con el afán de contribuir dijo que habrá de trabajar en conjunto, “lo demás es lo demás”.
Explicó que no teme porque la figura del súper delegado crezca políticamente y considere ser el próximo gobernador de estado.
“Si trabaja bien, si le va bien y si resuelve los problemas del estado gracias a una figura como del súper delegado, el pueblo lo va a pedir a gritos y sino también evidentemente tendrá la carga política, tienen gran responsabilidad que es representar todos los temas federales en el estado”, señaló.
Confió en que el delegado que designe le vaya bien en Hidalgo, “contará con una mano y brazos para trabajar, coadyuvar y contribuir”.
Además, coincidió que desaparezca todas las delegaciones, es decir a la estructura burocrática y que no solo se “descabece” a los delegados.
Por último, recalcó que como gobernador seguirá presidiendo el tema de seguridad, aunque dijo le da gusto que el delegado que se nombre sea corresponsable del tema de la seguridad.
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