Fotografía: Especial
El presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla, Martín Martínez Destunis, sentenció que el alza en el precio de la harina y el maíz provocará que los industriales paulatinamente suban el precio de la tortilla.
«El sector de la industria de la masa y la tortilla está muy deprimido porque no pudieron detener el alza en el precio de la harina y el precio del maíz se ha movido un poco hacia arriba por lo que estamos preocupados por la situación», sentenció.
Consideró que es ilegal llegar a un acuerdo en el precio de este producto de la canasta básica, pues afirmó que la oferta la regula el mercado, pues ejemplificó que de aumentarse a 17 pesos el kilo los demás industriales se emparejan.
«Entonces no hay acuerdo, no hay nada, pero es evidente que paulatinamente cada industrial tendrá que incrementar el precio de la tortilla para absorber los aumentos recibidos», previó.
Aseveró que alrededor del 5 por ciento de los pequeños industriales ya incrementó el precio de uno de los productos más consumidos en la canasta básica, ya que no les permite sostener el precio.
Afirmó que el precio del kilo de tortilla oscila en los 15 pesos, aunque también se oferta entre los 14 y 13 pesos, por lo que reiteró que cada industrial tendrá que ajustar el costo de acuerdo a su impacto.
Martínez Destunis, sentenció que ante el incremento de los insumos se prevé que subirá el costo del kilo de tortillas y no al margen de utilidad.
«Es evidente que va subir, pero dependerá del costo del producto de cada industrial que puede ser variante, desde 70 centavos hasta un pesos con 50 centavos; mientras su costo de producción sea más alto, más tendrá que subirle», sentenció.
Insistió que han detectado que el 5 por ciento de las tortillerías han tenido diversos incrementos que van desde los 70 centavos, 90 centavos incluso un peso con 50 centavos.
Por lo que confió que las empresas harineras no incrementen sus precios para que se detenga el alza al precio de la tortilla.
De manera conjunta, lamentó que el 3 por ciento de las empresas que se dedican a la producción de tortillas hayan cerrado sus puertas, debido a las condiciones económicas que se viven en el país.
Por último, determinó que la condición de la tortillerías en Hidalgo es cerrar los negocios, mantenerse en la informalidad o subir el precio de las tortillas.
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