Fotografía: Especial

 

De acuerdo con Carlos J Guizar,  Maestro en Políticas Públicas por Hertie School of Governance, el hecho de que el billete de 20 desaparezca y llegue el billete de 2 mil, es una muestra de que nuestro dinero vale cada vez menos.

 Por otra parte el libro «Moneda de Plata para México» de la UNAM, explica la importancia del «punto de fusión», es decir, cuando el valor intrínseco del metal en el que está hecha una moneda supera su valor nominal grabado. Es  entonces cuando surge la pregunta ¿realmente existe una pérdida ante un billete de plástico de 20 pesos o se están proliferando una estrategia para el gasto monetario?

De acuerdo con el libro de investigaciones jurídicas de la UNAM, el dinero que usamos es meramente ficticio, esto se resume de la siguiente manera: México necesita generar reservas de dólares o de lo contrario se colapsa el sistema monetario.

¿Cómo se consiguen las reservas? Se genera turismo, exportaciones entre otras cosas para adquirir dólares, porque el dinero nacional, en realidad no tiene un valor intrínseco.

El “centro de gravedad” es decir la estabilidad económica en México, no se basa en el centro del país, sino que se centra en el extranjero, por lo que no se trata de un progreso.

Estados Unidos fabrica dólares que son la reserva monetaria de todos los países del mundo, la investigación de dicho libro  plantea como solución generar monedas de plata las cuáles conllevan un valor intrínseco e inmunizan nuestro sistema monetario.

De aquí que el valor del que están hechas las monedas contienen un precio, por encima de su valor simbólico. Por ejemplo una moneda de 5 pesos de plata, ahora tiene un precio más elevado que el de su valor en “pesos”.

Los billetes en sí no tienen un valor, pues el material del que están hechos no contiene un precio tangible.

Desde 1971 el mundo no se rige por un sistema monetario internacional, sino por una explotación monetaria internacional.

“Si bien existe una disputa entre los billetes, debido a que el precio para acceder a una compra cada vez sube de precio, esto no consiste en el valor ficticio del billete, sino en una estrategia monetaria”, refirió José Rivera, economista del Tecnológico de Monterrey.

Por otra parte se publican «memes» y existe una confusión caótica respecto al tema. No se debe evadir  que si bien los salarios bajan y los precios de los alimentos suben, no tiene que ver necesariamente con el cambio de un billete de 20 a uno de mil, sino a la reserva monetaria que desde 1971 hasta la fecha ha aumentado a un 130 por ciento lo que simboliza 8 mil 181 mil millones de pesos (esto en el último registro de 2010 por la UNAM), esto de acuerdo con la información de los especialistas

 

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