Fotografía: Edén Torres
A través de las dos “Escuelas de Campo” existentes en Hidalgo, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícola y Pecuarias (Inifap) busca que productores agrícolas produzcan más con el menor impacto ambiental posible, pues sí es posible mejorar e incrementar la producción sin acabar con el ecosistema.
René Gómez Mercado, director de coordinación y vinculación del Inifap en Hidalgo, explicó que a través de esta estrategia se hace una vinculación entre universidades y extensionistas con los productores para desarrollar capacidades y lograr una transferencia integral de las prácticas de manejo sustentable que atienden tanto productividad como conservación del medio ambiente.
Actualmente los trabajos de este modelo se desarrollan en los ejidos de comunidades y en paralelo con el proyecto ProTierra que promueve la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (mundialmente conocida como la FAO) que tiene cobertura nacional y donde se hace un diagnóstico para detectar áreas de oportunidad.
Las dos escuelas que se tienen en Hidalgo están en Santiago de Anaya y El Cardonal, donde se trabaja en cultivos forrajeros de frijol, maíz, manejo de borregos, así como la restauración forestal para que también le entren al tema y al cuidado del medio ambiente al momento de cultivar, pues hay prácticas agrícolas nocivas que degradan al suelo y pueden ser reemplazadas.
Gómez Mercado puntualizó que el éxito de estas escuelas no concluirá una vez que las y los participantes regresen a su lugar de origen e implementen estas nuevas técnicas, sino que también las repliquen con el resto de productores de su región para que se tenga un alcance mayor con el modelo de estas escuelas que “aprender haciendo”.
SJA