Fotografía: Especial
La demanda de banquetes y salones ha reducido un 15 por ciento en fiestas decembrinas porque instancias gubernamentales ya no dedican recurso a eventos privados informó Alan Vera, titular de Canirac Hidalgo.
La industria restaurantera está pasando por malos tiempos, uno de los factores, de acuerdo a Alan Vera, es el hecho de que las preposadas y fiestas de las instituciones de gobierno ya no se realizan en salones privados como lo era anteriormente, sino que prefieren hacerlas en sus propias instalaciones.
“Los comentarios de nuestros afiliados banqueteros es que la realización de eventos de empresas privadas y gobierno va a la baja en comparación con el año pasado”, refrió.
Sin embargo no solo es este componente el que ha propiciado que los restauranteros se encuentren en crisis económica, las altas tarifas de energía eléctrica por parte de la CFE en el último semestre han aumentado hasta un 50 por ciento, lo que representa en porcentaje el mismo costo de la renta.
“Esto hace que el costo de operación de las unidades de negocio sea más elevado y cada día más complicado”, señaló el titular de Canirac.
Finalmente, y aunado a ello, el incremento del 40 por ciento de la gasolina, vital para el transporte de los productos, ha provocado que en su conjunto, más de 7 restaurantes en Hidalgo hayan quebrado y cerrado sus puertas, agregó Alan Vera.
SJA
