Fotografía: Especial

En un discurso emitido esta noche en cadena nacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump reafirmó sus intenciones de construir el muro fronterizo en la frontera con México.

Trump lanzó nuevamente su mensaje de criminalización hacia  los migrantes, calificandolos como una amenaza a su país. Indicó que el tema migratorio se traduce en una situación de crisis de seguridad nacional.

«Cuanta más sangre de estadunidenses debemos derramar para poder detener esta crisis», arremetió.

Asimismo aseguró que no habrá ningún acuerdo con el congreso que permita reabrir las actividades del gobierno que se mantienen detenidas, si sus integrantes   no ceden a su petición de destinar recursos para la construcción del muro.

Como respuesta al mensaje, los congresistas demócratas, minutos después, declararon que no cederán a la petición y que reconocen que el asunto migratorio es de máxima importancia para el país pero que definitivamente no aceptarán que el muro sea la solución.

Los congresistas hicieron un llamado al presidente a reabrir las actividades gubernamentales para que de esta forma se pueda debatir el asunto, mientras que Trump aseguro que no habrá apertura del gobierno si antes no se aprueba su iniciativa. Es decir que hasta esta noche ninguna de las partes involucradas ha mostrado s disposición a ceder a la la petición de su contraparte.