Cosas que fueron

150 años de vida institucional de la Universidad Autónoma de Hidalgo

Habían transcurrido apenas 18 días del nacimiento del Estado de Hidalgo, cuando un grupo de esforzados pachuqueños preocupados del futuro de la naciente entidad, funda la “Sociedad Protectora de Educación Secundaria” con el exclusivo fin de abrir un plantel de educación superior que formara a las nuevas generaciones que habría de dirigir a la nueva entidad federativa, ellos fueron los doctores Miguel Varela, Marcelino Guerrero y el señor Agustín Cárdenas, a los que se aunaron más tarde el licenciado Ignacio Durán y el señor Felipe B. Guerrero.

El primer paso fue dirigir un curso al gobernador comunicándole los objetivos de aquel grupo. Para sorpresa de los fundadores, al día siguiente de recibir la misiva el gobernador provisional –llegado a Pachuca el 27 de enero de 1869- no solo reconoció la formación de aquel grupo, sino aún más, aprobó la inmediata apertura del plantel y les otorgó para establecerlo las antiguas instalaciones del exhospital de San Juan de Dios –que deberían reacondicionarse para tal efecto– mientras tanto se dieron a la tarea de conseguir un local provisional y decidieron arrendar la casa marcada con el número 40 de las calles de Allende frente a la plazuela del Xixi –hoy Jardín de los Niños Héroes–donde actualmente se encuentra las oficinas del DIF Estatal.

Integrado el cuerpo docente con los mejores profesionistas que existían en la capital del Estado se procedió a convocar a inscripciones y el 3 de marzo del propio 1869, con la asistencia del gobernador Doria se celebró la ceremonia de inauguración del que se llamó oficialmente Instituto Literario y Escuela de Artes y Oficios del Estado de Hidalgo.

El acto fue celebrado en el antiguo teatro El Progreso –propiedad de don Agustín Cárdenas, ubicado al norte de la Plaza de la Diligencias hoy de la Independencia– ceremonia a la que asistieron el gobernador Doria, los miembros de la Sociedad Protectora y los miembros de las familias más prominentes de la ya capital del estado.

Para desconsuelo de los fundadores el 8 de marzo solo se habían inscrito 4 alumnos aunque en el transcurso del ciclo escolar se inscribieron 23 pensionados por los municipios, a los que el gobierno otorgó becas y ocho más, en calidad de supernumerarios, con lo que se alcanzó un total de 35 estudiantes matriculados.

Nació así nuestra “Máxima Casa de Estudios del Estado”, ésa que hoy alberga a cerca de 60 mil estudiantes en campus diseminados por toda la geografía hidalguense y es considerada como una de las 6 mejores Universidades de México.