Fotografía: Ivet Pasquel 

Un nutrido grupo de féminas marcharon por las principales calles de la cuidad para alzar la voz ante la ola de violencia en contra de las mujeres en la entidad y para exigir al Gobierno de Hidalgo que se garantice la libertad, la vida y la dignidad.

Ataviadas con pañuelos verdes, las féminas se situaron frente a Palacio de Gobierno para exigir a las autoridades seguridad y justicia por las personas desaparecidas y asesinadas.

 “Exigimos a las autoridades y a los tres niveles gobierno garantizar la libertad, la vida y la dignidad”, se escuchó.

Además, una de las protestantes rechazó que en pleno 2019, los derechos de las mujeres se estén cuestionado y sometiendo a intereses partidistas y políticos, por lo que alzó la voz para que en Hidalgo el aborto sea legal.

“Queremos leyes garantes de derechos, estados laicos, personas libres y sociedades respetuosas”,  entonó una mujer.

Durante la marcha nocturna,  las participantes pidieron seguridad, dignidad, paz y vivir una vida libre sin miedo al salir a las calles.

“Ni una más, ni una asesinadas más”, se replicó durante el trayecto de la marcha que comenzó en el Reloj Monumental, prosiguió en la calle Guerrero, Juárez y Madero, en donde hicieron una pausa  en el Monumento a la Revolución para colocar un pañuelo verde a la estatua del artillero mexicano Felipe Ángeles como símbolo de represión.

“Hay que abortar, a este sistema patriarcal”, fue uno de los lemas más escuchados en la marcha de este lunes 25 de noviembre donde se conmemoró el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.

¿Por qué nos asesinan, si somos la esperanza de  América Latina?, también se replicó durante el trayecto en donde participaron mujeres de todas las edades en la capital del estado para ser la voz de las mujeres asesinadas en la entidad.

En Hidalgo se han contabilizado 57 muertes violentas de mujeres, aunque de manera oficial se tienen un registro de 17 feminicidos hasta el mes de octubre en la entidad.

Además se informó que mujeres fueron localizadas en 30 de los 84 municipios cuyas edades oscilan desde los 11 meses hasta los 92 años, por lo que la vida de las féminas está en riesgo en cualquier momento de su vida.

 

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