Fotografía: Especial
Dana Paola tenía 13 años de edad y falleció a causa de la diabetes juvenil que padecía; sus padres cumplieron con el último deseo de la pequeña, que era donar sus órganos.
En el Instituto Mexicano del Seguro Social de Tamaulipas, los médicos y enfermeras rindieron homenaje a la menor antes de ser intervenida para iniciar con el proceso de donación de órganos, a través de la lectura de una reflexión y un minuto de aplausos, lugar en donde sus padres también se despidieron de ella. Los órganos que se preservaron y fueron trasplantados a otros niños son córneas, riñones y el hígado.
Dana sufrió de diabetes infantil desde que era una niña pequeña, a ella le eran suministradas tres dosis de insulina diarimente y por su delicado estado de salud estudiaba en una escuela especial. La niña fue ingresada al Hospital de Ciudad Madero desde el 24 de diciembre por presentar elevados niveles de Glucosa.
En ese nosocomio Dana estuvo internada por dos meses, en los cuales su condición de salud se agravó y supero dos paros cardiorespiratorios, pero por desgracia el fin de semana presentó muerte cerebral.
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