Fotografía: Especial

 

En Hidalgo, datos de la Subdirección de Epidemiología señalan que la incidencia por cáncer en el 2022 con corte a noviembre fue de 43.3 casos por cada 100 mil habitantes, siendo la mayor incidencia en niños de cinco a nueve años, seguido por el grupo de diez a 14 años con tasa de 80.5. De lo anterior, el 52.9 por ciento (%) correspondían a leucemias y el 47.1% a tumores sólidos.

De las leucemias, el 87 por ciento son leucemias linfoides agudas; en los tumores sólidos, el 39% son tumores del sistema nervioso central, seguido de tumores renales (19%).

La sobrevida estatal en niños y adolescentes asentados en el Registro de Cáncer en Niños y Adolescentes (RCNA) es del 76.2 por ciento.

La Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) difunde de manera permanente los signos y síntomas de alerta para sospecha de cáncer en niñas, niños y adolescentes menores de 18 años, entre los que destacan: sudoración nocturna o excesiva; pérdida de peso; dolor de huesos y articulaciones; palidez progresiva, fatiga, cansancio o apatía sin causa aparente; fiebre persistente o recurrente que dure varios días y no ceda a tratamientos comunes.

Otros signos más específicos incluyen:

  • Sangrados frecuentes de nariz o de encías al cepillarse los dientes.
  • Puntos rojos o morados en la piel (petequias) o moretones sin causa aparente.
  • Crecimiento irregular en abdomen; y de bolitas (ganglios) progresivo en cuello, axilas o ingles, sobre todo si son nódulos duros, grandes y sin datos de infección que no disminuyen con desinflamatorios.
  • Crecimiento anormal en cualquier parte del cuerpo.
  • Reflejo blanco en pupila.
  • Desviación de mirada o aumento de volumen en uno o ambos ojos.
  • Dolor de cabeza persistente que empeora con el tiempo y no cede con medicamento, asociado a nausea o vómito que puede estar acompañado de cambios de la conducta o alteraciones neurológicas (mareos, movimientos involuntarios, convulsiones, hormigueo, pérdida del equilibrio, alteraciones al caminar y pérdida de sensibilidad).

 

FMS