Fotografía: Israel Solares 

 

 

El derecho a la libre manifestación no debe ser sinónimo de cometer daños físicos ni afectar a terceros, indicó Guillermo Olivares Reyna, secretario de Gobierno de Hidalgo (Segoh), ya que son prácticas viejas que deben dejar de replicarse porque solo causan afectaciones.

 

Tras concluir la comparecencia ante integrantes del Congreso local, como parte de la glosa del primer informe de actividades del gobierno estatal, en este sentido lamentó que derivado de las marchas feministas, hoy se tenga que realizar una inversión para rehabilitar la imagen de El Reloj, cuando ese dinero pudiera usarse para otros rubros que permitan fortalecer a la mujer.

 

Por ello espera que una vez que se recupere la imagen de la infraestructura, no se vuelvan a presentar estos hechos para que el recurso no se destine a restauraciones y sí para acciones concretas que den respuesta a las problemáticas que tienen muchas de ellas.

 

Afirmó que si tienen muchos años sin recibir respuesta, es natural su enojo, sin embargo, en el gobierno actual deberán estar bien atentos de que ahora sí tengan respuesta a esa desatención acumulada, pero al mismo tiempo que debe ser contenida por ellas mismas, porque no pueden descargarla ahora con quienes son sus aliados.

 

En relación a los bloqueos, destacó: «Lamentablemente se arrastró como una costumbre, poco a poco está quedando atrás, y debe quedarse a atrás. Desde luego no es una cosa espontánea, ni resultados de la represión, ni mucho menos. Hemos hablado con los que se manifiestan para hacerles ver que en principio si tratan de hacer saber una necesidad o quejarse de alguna autoridad, no es necesario que afecten a terceros, nosotros vamos», dijo.

 

Afirmó que para evitar esto es necesario que las y los secretarios vayan a todos los rincones, escuchen e informen que se está trabajando, que aprovechen eso encuentros para reclamar y señalar que no han cumplido con lo que les prometieron, ya que se han encontrado casos que han pasado hasta 20 años sin que les hagan caso.

 

 

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