Fotografía: Especial
El día de ayer, en Colombia, el Palacio de Justicia ubicado en la ciudad de Tuluá fue incendiado, esto tras una ola de protestas ocurridas en este país, lo cual terminó en caos y violencia.
El ministro de Justicia colombiano, Wilson Ruiz, declaró: “Ataques como los de esta noche en Tuluá dejan de ser vandálicos y se convierten en actos terroristas. La protesta pacífica es legítima, la violencia es delito”.
Aún se desconoce la identidad de los responsables pues ante el caos vivido el Tuluá desde el 28 de abril, cobrando ya la vida de 43 personas.
De igual forma se han reportado casos de saqueos y violencia en general contra la población, así como destrozos en la zona urbana.
Aledaños a la ciudad de Tuluá en las zonas rurales hay una gran participación de grupos delictivos como el Clan del Golfo (la mayor banda criminal de Colombia) o las paramilitares Águilas Negras.
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