Fotografía: Especial

El maestro en estudios sociales por la Universidad  Autónoma Metropolitana, Juan Carlos Ávila, señaló que pese a las inversiones que se han generado en Hidalgo, los empleos siguen siendo escasos, los salarios bajos y que incluso hay sectores en los extremos del estado que siguen siendo precarios.

Informó que sin duda existe desigualdad en el estado como lo demuestra  el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval),  Hidalgo, es uno de los estados más pobres, porque si bien tiene algunas empresas importantes y desarrollos industriales, principalmente en Tula, Tulancingo y Tizayuca, generalmente su economía se basa principalmente dentro de la capital.

Sostuvo que el ‘aparato burocrático estatal’ y los municipios “realmente carecen de una estructura industrial fuerte y por lo tanto la pobreza se condensa más en las zonas alejadas de la capital”.

Señaló que para menguar el desequilibrio económico que existe en el estado, la clase política no debería ver a los ‘pobres’ como jugadores con beneficios eventuales, es decir que los partidos ven en la gente pobre de la periferia y zonas más alejadas (las sierras) como un conjunto de posibles votantes porque les dan incentivos para que voten por ellos (por los políticos).

Expresó que los programas sociales están constituidos a partir de una decisión político electoral más allá de que esas personas realmente lo necesiten.

Informó que podrían implementarse programas de desarrollo en los lugares en donde se concentra la mayor pobreza y  que el estado invierta en cuestiones de educación y mayor inversión de empresas pero que esas empresas sean corresponsables.

Lo anterior, debido a que en ocasiones existe la inversión  por parte de empresas transnacionales y del país en Hidalgo, sin embargo los salarios siguen siendo muy bajos y eso hace que Hidalgo realmente no progrese, por lo menos en términos de precarización del trabajo y dimensión salarial.

Finalmente destacó que es importante que las nuevas empresas como Grupo Modelo y Reyma, generen empleos, pero también se deben implementar  salarios dignos para beneficiar a la gente en Hidalgo.

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