Fotografía: Nelly Téllez

Familiares, amigos y vecinos de personas desaparecidas, junto con un grupo de ciudadanos formaron un contingente morado que marchó por las calles pachuqueñas para exigirle a las autoridades locales agilizar las maniobras de búsqueda, pues la esperanza de encontrarlos vivos no se ha desvanecido.

Fue una marcha pacífica pese al dolor atravesado en el alma, la mirada reflejaba el descontento y los gritos demostraban la rabia contenida por ver a unas autoridades ausentes, lentas y con pocos avances en las investigaciones, pues aunque se abren carpetas, estas siguen intactas, no hay pistas, solo un vacío.

Para todas estas personas el tiempo avanza y no cura la herida, solo la prolonga al tiempo que mata un pedazo del corazón, porque cada mañana, la herida sangra un poco más, pues hay que alimentar la esperanza; pero sin ninguna noticia de las autoridades, se vuelve difícil sostener la mirada sin que una capa brillosa cubra los ojos.

No se quedaron callados, no se permitió que el silencio apareciera en ningún momento, las consignas resumían su malestar “Disculpen las molestias; pero nos están asesinando”, “¿Dónde están, dónde están?”, “Tú que estás mirando, también te están chingando”, “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, “Pachuca escucha, súmate a la lucha”.

Han pasado 12 días desde que desapareció y para sus familiares han sido un calvario. Su mamá, María de Jesús Valdez López, y su hermano, Marco Antonio Téllez Valdez, avanzan a paso lento; pero firme. Caminan sosteniendo una pancarta donde detallan las señas particulares de, Karla Donají, cabello largo y negro, delgada, estatura 1.56 metros, ojos oscuros y argolla en la nariz.

El dolor se ha plasmado en su rostro, no es que no quieran reflejar el sentir, sino que el pesar no los deja, la vida parece que se escapa con cada minuto porque no hay respuestas de las autoridades precisas, solo “estamos trabajando, señora”; pero eso y nada es lo mismo.

El caso de, Karla Donají, es uno entre varios, donde familiares, amigos, conocidos y no conocidos no van a permitir que el gobierno olvide y no van a dejar de gritar los nombres de, Ernesto Pérez Pérez, Olayet Cabrera, Rut Lohengrin, Ana Sofía Carbajal, padre e hijo encontrados en La Loma, Brenda Sarai Cabañas, Analy Rodríguez Salomón y los 12 desaparecidos en Huichapan.

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